Como padres, solemos estar pendientes de las etapas madurativas de nuestros hijos. Y a veces, ciertos indicadores nos llevan a poner en duda si se estan desarrollando con normalidad.
En esta nota te acercamos las pautas de evolución habituales y herramientas que te ayudarán a hacer un seguimiento y observaciones para que, en caso que detectes algún signo de alerta, consultes con el pediatra. Todo tratamiento que abordes tempranamente ayuda a obtener mejores resultados.
Los siguientes son ejercicios y actividades que el bebé debería seguir con normalidad en cada etapa.
0-3 MESES
*Tiempo boca abajo: debe pasar un total de 60 minutos diarios acostado sobre su panza para el desarrollo motriz de la espalda, cuello y brazos.
*Tiempo de abrazos y masajes.
*Estimular sus respuestas con rostros y con objetos brillantes y de colores.
*Hablarle seguido para enseñarle que existe un lenguaje para la comunicación.
4-6 MESES
*Tiempo boca abajo: Debe estimularse al bebé a darse vuelta por sí mismo y alcanzarse objetos mientras juega sobre su panza.
*Ofrecerle juguetes para que explore y juegue con ambas manos.
*Hablarle para desarrollar su lenguaje. Es común que empiece a balbucear.
*Comunicarse con él, imitar los sonidos que emite y elogiarlo cuando él imita los nuestros.
7-9 MESES
*Colocar juguetes frente al bebé para estimular su movimiento.´
*Llamar a los objetos por su nombre frente a él; describir objetos durante actividades cotidianas.
*Usar juegos de causa y efecto (como esconderse detrás de las manos y reaparecer).
*A partir de los 8 meses, ofrecerle comidas para bebés y alimentos blandos.
10-12 MESES
*Colocar almohadones en el piso e incentivar al bebé a desplazarse entre ellos.
*Estimular al bebé a caminar sobre un sofá desde donde está hasta un juguete, usando el respaldo para sostenerse.
*Trabajar la comunicación y estrechar el vínculo mediante libros con ilustraciones.
*Responder a risas y murmullos del bebé para alimentar la comunicación de ida y vuelta.
13-15 MESES
*Ofrecer al bebé juguetes de empujar y jalar para que utilice mientras aprende a caminar.
*Estimularlo para apilar bloques y después derribarlos.
*Establecer rutinas sistemáticas para comer y acostarse.
*Cantar, tocar un instrumento para él y leerle regularmente para estimular el vínculo y la comunicación.
*Hacerle preguntas para desarrollar su proceso de toma de decisiones.
» Si durante alguna de estas etapas tu hijo encuentra obstáculos o dificultades para progresar en el desarrollo, no ignores estos síntomas y consultalos con un especialista.
Además, leé en los siguientes diagramas cuáles son las conductas típicas del bebé, y algunos signos de ritmos distintos a los que debemos poner atención. Podés tildar cada acción a medida que su evolución llega a ese punto y usar el gráfico como herramienta para llevar registro de su avance y tus observaciones.